En la primera y única Sesión Extraordinaria, del 30 de diciembre del 2011, se trató y aprobó un Proyecto de Ordenanza para declarar una nueva Emergencia Económica y Financiera de la Municipalidad para el año 2012.
Este pedido del Int. Montizanti sorprendió, teniendo en cuenta que el Int. saliente F. Varela, como el F.P.C. y S., dejaron claro en su momento que la Municipalidad estaba saneada: un presupuesto para el 2012 de 46 millones de pesos y unos 5 millones de deuda. Esto fue dicho por el Int. Varela en una entrevista en Radio Poriajhú el día 29/12/2011, en el programa El Hormiguero.
Si uno analiza los Considerando de dicho Proyecto de Ordenanza se puede leer: “Que, de no declararse una nueva emergencia económica y financiera [la anterior fue en el 2009], esta Municipalidad no podrá afrontar el reclamo de los acreedores ni satisfacer los Servicios públicos existentes”. Esto muestra la gravedad de la situación y desmiente los dichos. Siguiendo con los Considerando, se dice “Que, es interés de esta administración sanear paulatinamente el desequilibrio económico-financiero con medidas tendiente al aumento de la recaudación financiera”, pero en este sentido no se explicita a quiénes o a quién se le aumentará la presión tributaria. En otro tramo se expresa que ”la emergencia hace aconsejable la adopción de medidas que operen como Contención del gasto público”, aunque no se especifica qué gastos públicos se van a contener.
Entre las resoluciones aprobadas por el Concejo, está la siguiente que enuncia que ”la emergencia tendrá vigencia desde el 1 de enero del 2012 y hasta el 31 de diciembre de 2012. El Departamento Ejecutivo podrá darlo por concluido antes de la fecha indicada, si considera superados los hechos que provocan el estado de emergencia, y prorrogarlo si dicho estado se mantuviera”. Además el DEM ha pedido una serie de facultades y poderes extraordinarios –superpoderes– que el Concejo aprobó, de tal manera que le transfirió facultades que le son propias al Concejo, entre las cuales está la de controlar los actos del Ejecutivo.
Estos superpoderes pedidos y otorgados por la banca oficialista no hacen más que funcionar de un modo contrario al sistema de “democracia representativa”, porque el Concejo Deliberante pasa a ser una instancia meramente formal dentro del gobierno municipal.
A nivel nacional, el otorgamiento de “superpoderes” al Poder Ejecutivo se trató en el Parlamento. Con muy buen criterio, diputados y senadores radicales y socialistas se opusieron, pero en este caso son oposición, independientemente de que se esté tratando el mismo asunto: atribución de facultades y poderes extraordinarios.
En el Concejo bermudence, la bancada de la oposición (concejales del Frente para la Victoria y del Partido Obrero) se opuso al proyecto pero sin presentar uno alternativo y sin ir al fondo del asunto, reclamando los elementos que justifiquen la aplicación de la emergencia. Tampoco reclamaron la presencia de miembros del Ejecutivo, para que expusieran los argumentos que justifiquen la Emergencia. La oposición todavía no muestra un plan de acción definido, dentro y fuera del Concejo, que signifique aumentar el protagonismo político.
La bancada oficialista votó favorablemente el proyecto, sin pedir ni explicar públicamente, en la sesión, los causales para la aprobación de la medida. El Int. Montizanti pidió en esta Ordenanza, “Superpoderes”, tratando de eludir futuras autorizaciones del Concejo, como corresponde en esta división de Poderes en sistema democrático. ¿Pensará que al no pedir autorización gana más “autoridad”?
Estos son los primeros pasos dados por un Intendente elegido democráticamente, ¿son los más “aconsejables”?
Enzo Di Crosta
Enero 2012
